Siempre, es siempre. ~

Recuerdo todas esas tardes contigo... parece que sea ayer. Las risas era algo que no faltaba en aquella habitación de colores. Me sentía feliz cuando estabas a mi lado, cuando sabía que no me ibas a fallar, que ibas a estar ahí cuando te necesitara, haciendo tu perfecto papel de hermana mayor. Dándome consejos cuando te los pedía y cuando los necesitaba, que por cierto, debo darte las gracias por esos magníficos consejos. Ojalá pudieras darte cuenta de lo mucho que te hecho de menos, de lo que has sido, y de lo que eres para mi, de lo importante que te has convertido en mi vida, desde el primer momento, y de lo importante que sigues siendo, a pesar de la distancia. No hay ni un solo día en que me acuerde de ti, como no iba a hacerlo, si eres mi hermana mayor. No sabes cuanto me gustaría hablar contigo, saber si estás bien, como te va todo, si eres feliz... porque yo desde luego que no consigo levantar cabeza desde que te fuiste, lo intento, pero no lo consigo, te recuerdo cada día, pero sobretodo recuerdo que ya no estás aquí, a mi lado, dándome las fuerzas que necesito para seguir, pero poco a poco me voy dando cuenta que tal vez solo soy yo la que se acuerda... y lo seguiré haciendo siempre. Y siempre, es siempre. Ojalá estés leyendo esto, aunque lo dudo bastante. Sabes que va dirigido a ti, lo sabes. Y también sabes que te amo moltó mesé meí.